La épica e Higuaín disfrazan el desastre
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Sí, no nos volvamos locos. Es cierto que el Real Madrid emocionó en su partido contra el Getafe por su casta y coraje, pero el partido de ayer fue una auténtica moneda al aire y salió cara porque Casquero se empeñó en no certificar la permanencia azulona en Primera.
Un capítulo aparte merece Gonzalo Higuaín. El argentino volvió a tirar del equipo cuando más se le necesitaba. Guti no jugó un buen partido pero se está convirtiendo en un auténtico especialista a balón parado. Raúl ni está ni se le espera y Huntelaar participa muy poco en el juego de ataque. Todos estos ingredientes hacen de este equipo la antítesis del juego colectivo.
Ahora toca pensar en Sevilla. Personalmente (y no quiero ser ventajista) pensaba que el partido del Pizjuán era más sencillo que el del Getafe. Me explico: esta temporada he visto bastantes partidos del Sevilla jugando como local y en casi todos dejó la sensación de que siente más cómodo como visitante. Cuando juega contra equipos ordenados sólo lleva peligro en las acciones de estrategia y ahí, ha mejorado mucho el Madrid. Pero en estos momentos la lectura cambia. Las bajas de Robben, Pepe e Higuaín deja a Juande Ramos sin varias de sus piezas básicas.
Por cierto, quisiera dar un tirón de orejas al entrenador manchego. Es verdad que Robben no está para jugar dos partidos por semana, pero creo que debería haberle puesto de inicio para después sustituirle en el descanso. Seguro que si hubiera sido titular no habría jugado con tanta ansiedad, habría calentado mejor y el peligro de lesión se habría reducido considerablemente.
No quiero cerrar este post sin antes hablar de la salvajada de Pepe. La sanción debería ser ejemplar para demostrar a los jugadores y a todos los aficionados (no olvidemos que muchos niños siguen este deporte) que estas estupideces no tienen cabida en un terreno de juego.
P.D. 1: Estoy preocupado. A pesar de la épica remontada merengue no me arrepiento de no haber visto el partido. Me quedé en casa con la radio encendida y viendo en la tele el increíble Liverpool-Arsenal. Eso sí que es fútbol.
P.D. 2: Soldado no se merecía los silbidos del Bernabéu. Siempre se ha mostrado agradecido al Madrid y tuvo la delicadeza de no celebrar el gol que marcó. Hay que tener más señorío.
Publicado el 22 de abril de 2009 a las 11:45.