Diego López aún no se ha ganado el respeto
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Después de unas semanas de calma tensa, la polémica ha vuelto a instalarse en la actualidad del Real Madrid. La recuperación de Iker Casillas ha abierto un cisma en torno a cuál debe ser el guardameta que defienda la portería del Real Madrid en los meses clave de la temporada. Antes de que el debate tomase cuerpo, Mourinho ha sido muy claro: "Será muy complicado que Diego López salga de la portería".
Lo que debería tomarse como una defensa pública del portero que ha ayudado a que el Madrid siga vivo en Copa y Champions, sólo ha servido para que los defensores a ultranza de Casillas saquen todo su arsenal para colocar al mostoleño de nuevo en la titularidad. Algunos ven en esa decisión de Mourinho una continuidad de la polémica creada por el entrenador portugués a finales de diciembre. Sin embargo, hay matices que no conviene dejar en el tintero. Si en aquel momento no parecía oportuno que Casillas pasase al banquillo, entre otras cosas porque Adán no mejoraba sus prestaciones, ahora sí que nos encontramos con un portero de garantías que ha hecho méritos para, al menos, que se discuta quién debe ser el titular.
Por supuesto que se debe tener en cuenta la excelsa trayectoria de Casillas, sus años como pilar básico del equipo y también de la selección, pero eso no debe ser un billete seguro para la titularidad de ningún futbolista. Si nos ceñimos al rendimiento histórico de un jugador y no al momento actual, sería idóneo que Florentino Pérez hiciera un contrato como jugador a Alfredo Di Stéfano o al gran Paco Gento. Casillas ha demostrado ser un portero excepcional, a la altura de los mejores de la historia, pero debe superar un nuevo obstáculo en su carrera y ganarse el puesto a base de recuperar su mejor nivel. Conociendo la trayectoria de Mourinho, no sería extraño que el mensaje que lanzó el portugués en La Romareda vaya por esos derroteros, aunque algunos no quieran verlo. Aunque lo pensase, salir en rueda de prensa anunciando a bombo y platillo que Casillas volverá a ser titular como si nada hubiese pasado sería hundir en la más absoluta miseria a Diego López.
Todo este debate sería absurdo si actualmente el Real Madrid no contara con Diego López. Igual que se tiene memoria para recordar la carrera de Casillas, tampoco conviene olvidar que hace poco más de dos meses el gallego llegaba a la portería blanca con mucho que perder y poco que ganar. El Madrid estaba contra las cuerdas y se jugaba su continuidad en Copa y Champions nada menos que ante Barça y Manchester United. En ambas eliminatorias Diego López fue clave, justificando su fichaje por el Real Madrid y ayudando a que siga abierta la puerta de los títulos.
Además, esta polémica ha dejado con las vergüenzas al aire a muchos críticos que ahora apelan al rendimiento histórico y al estatus ganado por un jugador en el club. Hace pocas semanas se produjo un caso similar en el Real Madrid sobre el que nadie ha perdido un minuto discutiendo. Pepe pasó por el quirófano y Varane aprovechó la oportunidad para ganarse la confianza de todos los madridistas, incluido Mourinho. Cuando el '3' volvió a estar disponible, Varane siguió siendo un fijo en el eje de la zaga con todo el merecimiento. Si ese cambio no se produjo con Pepe, uno de los 'hombres de Mourinho', no tendría lógica que se realizase con Casillas. Por lo visto, Diego López se ha ganado el puesto en el Real Madrid, aunque parece que no ha logrado hacer lo mismo con el respeto.
Publicado el 1 de abril de 2013 a las 09:15.