Archivado en: Amy Winehouse, Blake
Pensaba que yo era el máximo desastre cerca de una cocina, pero veo que no. Amy Winehouse me supera. La cantante del 'No, no, no...' se encuentra de retiro espiritual en una isla del Caribe, donde intenta olvidar su presunta separación y la futura paternidad de su ex -Blake- con otra.
Lo malo es que con tanto retiro, tanto yoga y tanta vida sana, Amy anda un poco despistada. Intentó cocinar un poco de pasta para unos invitados y se le cayó el agua hirviendo en todo el muslo izquierdo, aunque su agente asegura que está bien y que no tiene dolor.
En la otra cara de la moneda, y en declaraciones a 'The Sun', recogidas por otr/press, un amigo confiesa: "Sólo viendo las heridas de Amy te das cuenta de que deben ser muy dolorosas, creo que debería cubrirlas o protegerse bajo una sombrilla". Pero Amy prefiere hacerse la fuerte y sacar su pupita al viento y al sol, aunque dicen que se retorcía de dolor en el momento de lo ocurrido.
Un consejo Amy, haz caso a los médicos, cúbrete la herida y deja la noche y la cocina. Dedícate a cantar y a llamar a las pizzerías. Son muy rápidas.
Misión: Curar a Amy.
Publicado el 21 de abril de 2009 a las 19:00.
