El blog del Mundial de Sudáfrica

Los críticos más pesimistas han encontrado razones de peso en el Mundial de Sudáfrica para reafirmarse en la teoría de que las tácticas le van ganando terreno al espectáculo en el fútbol. Para los que aún creen en la improvisación y la calidad por encima de la pizarra, se avecina un clásico: Brasil-Holanda.

Es cierto que estas dos selecciones han dejado a un lado gran parte de sus cualidades para encontrar el camino de la victoria. En Brasil ya no hay espacio para las diabluras de Ronaldinho, ni para la magia de los jóvenes Neymar o Pato. En su lugar, Dunga prefiere un ejército de soldados cuyo máximo exponente es Gilberto Silva. En una situación similar vive Holanda. Van Maarwijk no ha renunciado al fútbol con extremos, pero casi. Sólo la incuestionabilidad de Robben evita que la 'oranje' renuncie a sus principios.

Las tres veces que estas selecciones se han visto en un Mundial dejaron partidos para la historia. La primera vez en Alemania '74. Allí, una de las versiones más grises de la 'canarinha' que se recuerdan cayó en la fase de grupos ante Holanda gracias a los tantos de Neeskens y Cruyff. La 'Naranja mecánica' tomaba la bandera del juego alegre y ofensivo.

Pasaron veinte años hasta que estos dos equipos se volvieron a medir en un Mundial. Fue en Estados Unidos y con un puesto en semifinales en juego (como pasará este viernes). La dupla Bebeto-Romario dejó su sello con dos goles mágicos que ponían un 0-2 a favor de Brasil. Sin embargo, el gran Dennis Bergkamp y Aaron Winter igualaron el partido. Un obús de Branco en la fase final del encuentro desniveló la balanza.

Cuatro años después, Holanda tenía la ocasión de tomarse la revancha en las semifinales de Francia. Los tulipanes ponían a prueba a los campeones, pero Ronaldo adelantó a la 'canarinha'. Cerca del final, Kluivert hizo justicia y puso el empate en el marcador. Tras la prórroga, los penaltis decidieron el partido. Ahí surgió la inesperada figura de Taffarel.

Con un balance de 2-1 para Brasil, Holanda tiene la oportunidad de tomarse la revancha este viernes.

Francisco Quirós Soriano

francisco@gentedigital.es

Publicado el 1 de julio de 2010 a las 01:00.

Camerún, Marruecos, Senegal... todas ellas han sido las selecciones que a lo largo de la historia del Mundial han agrandado la esperanza sobre los equipos africanos. Las tres selecciones han tenido un papel de equipo revelación en anteriores participaciones, Senegal en 2002, Marruecos en 1986 y Camerún en 1990; pero nunca consiguieron superar los cuartos de final.

Tras unos años de exportación de jugadores africanos a las grandes ligas europeas y del trabajo táctico de algunos seleccionadores, el otrora anárquico fútbol africano ha dejado paso a algunas selecciones donde el rigor sobre el terreno de juego es la seña de identidad. El máximo exponente de este sentido táctico es Egipto, una selección que puede presumir de haber ganado las últimas ediciones de la Copa de África.

Con los 'Faraones' fuera del Mundial, el testigo fue recogido por Ghana. De la mano de Milovan Rajevac, las 'estrellas negras' se han sobrepuesto a la baja de última hora de su capitán Essien y han ido quemando etapas hasta plantarse en los cuartos de final del torneo. Lejos de las decepciones de Camerún y Nigeria, los ghaneses se han convertido en la gran esperanza del continente que por primera vez acoge un torneo de esta índole.

El éxito radica en el gran sentido táctico del equipo. En el último partido ante Estados Unidos, Rajevac demostró tener variantes en función del rival. John y Jonathan Mensah formaron la pareja de centrales, con Pantsil y Sarpei en los laterales. Estos se vieron ayudados por el impagable esfuerzo de Inkoom, el lateral que brilló en el último Mundial sub-20, y André Ayew, el hijo del mítico Abedí Pelé. Annan da equilibrio en el centro del campo y Kevin Prince Boateng es el encargado de armar el juego.

En la delantera, uno de los nombres propios de esta selección: Asamoah Gyan. Sus características le sirven para poder jugar como único delantero. El gol ante Estados Unidos le define a la perfección: pelea, potencia y definición. Sin ser un punta de grandes números (13 goles este año con el Rennes), Gyan ha aprovechado el escaparate que supone este Mundial.

Él y el resto de sus compañeros esperan cumplir el sueño de llegar por primera vez a semifinales y rubricar en un Mundial absoluto todo lo bueno mostrado a lo largo de la historia en categorías inferiores. Uruguay tiene motivos para preocuparse.

Francisco Quirós Soriano

francisco@gentedigital.es

Publicado el 1 de julio de 2010 a las 00:30.

Uruguay lleva unas semanas llenas de ilusión. La razón no es otra que la buena trayectoria de la selección 'charrúa' en el Mundial de Sudáfrica. Tras la decepción de 2006 cuando los Forlán, Recoba y compañía se despedían del Mundial de Alemania en una repesca ante Australia que se decidió desde el punto de penalti, este país de poco más de 3 millones de habitantes sueña con sumar otra estrella a su escudo.

Uno de los 'culpables' del buen momento de la selección que dirige Tabárez es Luis Suárez. El '9' de Uruguay es un claro ejemplo de talento precoz. A los once años contaba con ofertas de varios equipos para hacerse con sus servicios y él pudo elegir a Nacional, el conjunto de sus amores.

En 2006 dio el salto a Europa, pero en una de esas decisiones sólo entendibles por los representantes se marchó al Groningen, un modesto equipo de la Eredivisie holandesa. Ante el frío y la dificultad del idioma, Suárez respondió con goles, concretamente diez en 29 partidos, y el Ajax apostó por él. Rápidamente se convirtió en el referente del equipo de Amsterdam.

Tras tres temporadas superándose en el equipo 'ajacied', sorprende que este delantero uruguayo todavía no haya recibido la llamada de un grande. Capaz de jugar como 'nueve' y como segundo punta, e incluso como extremo, con buen chut y capacidad de desmarque...¿qué necesitaban los directores deportivos para terminar de convencerse de su valía? Suárez les ha dado la respuesta: su aparición en un gran torneo como el Mundial.

Con tres goles está en la carrera por el 'pichichi' del torneo, pero ya ha dejado su sello. Su tanto ante México sirvió a Uruguay para evitar a Argentina en octavos de final. Los otros dos ayudaron a mantener el sueño. Corea del Sur sufrió en sus carnes las cualidades de Luis Suárez: oportunismo en el primer gol y calidad a raudales en el segundo.

Se desconoce cuál será el techo de Uruguay en este Mundial. Lo único que parece claro es que Luis Suárez está preparado para dar el salto.

Francisco Quirós Soriano

francisco@gentedigital.es

Publicado el 1 de julio de 2010 a las 00:30.

Sólo quedan los ocho mejores. Después de disputarse la primera fase y los octavos de final, puede ser un buen momento para hacer balance en el plano individual, aquellos jugadores que están teniendo un papel relevante en Sudáfrica y, por contra, aquellos que no han respondido a las expectativas.

Uno de los jugadores que podría estar en el primer grupo es Leo Messi. El argentino estaba llamado a liderar a una selección argentina que llegó por la puerta de atrás a este Mundial. Un sorteo benévolo ha permitido a la 'albiceleste' ir cogiendo aire en el torneo y postularse como una de las claras candidatas al triunfo final.

Puede que Maradona no siga con mucha atención los partidos del Barcelona (dijo que Guardiola daba descanso a Xabi Alonso), pero el 'Pelusa' sí que ha copiado la ubicación en la que Pep sitúa a Messi. Lejos de la banda, por detrás del punta, como un clásico '10', donde también jugó Maradona en el mítico México '86. Otro síntoma más de que los extremos son una especie en peligro de extinción.

Ante la sequía de fútbol en el centro del campo argentino, Messi es el encargado de hacer fluir todo ese potencial que tiene en ataque la selección sudamericana. Argentina ya no sufre ante la inoperancia de Mascherano en la organización, o con el escaso fuelle del veterano Verón. Ahora todas las jugadas de ataque pasan por los pies del '10'. Una arrancada, un regate, una pared... son muchos los recursos que está usando el jugador del Barcelona para pasar a ser el verdadero líder de este equipo.

En un Mundial en el que Rooney, Cristiano Ronaldo e incluso Kaká están naufragando a medio camino entre las escasas prestaciones de sus equipos y su agotamiento físico, la buena noticia para el fútbol sale de las botas de Messi, a pesar de que, paradójicamente, todavía no haya estrenado su cuenta goleadora. Ante Alemania tendrá otra prueba de fuego, otro examen en su particular camino hacia el olimpo de los más grandes.

Francisco Quirós Soriano

Publicado el 30 de junio de 2010 a las 18:00.

La FIFA ha hecho pública la lista de 19 árbitros que seguirán en Sudáfrica para dirigir partidos restantes del Mundial. En esta lista no aparecen el uruguayo Larrionda, que pitó el Alemania-Inglaterra, ni el italiano Rosseti, presente en el Argentina-México. El arbitraje español estará representado por la figura de Alberto Undiano Mallenco.

El máximo organismo del fútbol internacional, que organiza la cita mundialista, ha dejado fuera al suizo Busacca. Éste pitó un penalti en contra de la selección anfitriona ante Uruguay. También han quedado señalados el malí Coulibaly (anuló un gol legal a Estados Unidos) y el francés Lannoy, que expulsó a Kaká de forma innecesaria en el encuentro que enfrentaba a la 'canarinha' contra Costa de Marfil.

Los otros dos colegiados que no continúan en Sudáfrica son el uruguayo Larrionda y el italiano Rosseti. El primero no dio validez a un tanto de Lampard que superó la línea de gol, pero no subió al marcador cuando Alemania gana 2-1 a Inglaterra en su choque de octavos. El segundo concedió un tanto a Tévez en el Argentina-México cuando el delantero de la albiceleste estaba en fuera de juego.

El árbitro navarro Alberto Undiano Mallenco, representante del arbitraje español en el Mundial, ha estado presente en tres encuentros hasta el momento. El seleccionador alemán Joachim Löw criticó con dureza su actuación durante el Alemania-Serbia, no tuvo problema en el Corea del Sur-Costa de Marfil y contentó a todos en el Holanda-Eslovaquia, una de las eliminatorias de octavos.

Marcos Blanco

marcos@gentedigital.es

Publicado el 30 de junio de 2010 a las 13:00.

Ocho selecciones han accedido a los cuartos de final del Mundial de Sudáfrica. Esta ronda mundialista comienza este viernes y lo hará con un 50 por ciento de combinados nacionales procedentes de Sudamérica (Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay), que supera por primera vez en la historia a una Europa con tres representantes: España, Holanda y Alemania. África sigue viva con Ghana.

Hace cuatro años, en el anterior Mundial, sólo Brasil y Argentina, dos selecciones sudamericanas, acompañaron a seis europeas en los cuartos de final del campeonato mundial de fútbol. Por una vez en la vida, América del Sur tiene más representantes que Europa en un fase tan importante de la competición futbolística más mediática del planeta tierra. 

Brasil, uno de los equipos favoritos al título, acabó primero en su grupo, goleó a Chile y se mide a Holanda por un puesto en semifinales. Argentina hizo lo propio en la primera fase, superó a México y se juega los octavos contra Alemania. Uruguay se medirá a Ghana, única selección africana que está viva en el torneo, y Paraguay, que jamás llegado tan lejos en un Mundial, busca la gloria frente a España.

Marcos Blanco

marcos@gentedigital.es

Publicado el 30 de junio de 2010 a las 12:00.

España ha marcado cinco goles en los encuentros que ha disputado durante este Mundial de Sudáfrica. Cuatro de ellos los ha conseguido David Villa, 'pichichi' del Mundial junto a Gonzalo Higuaín (Argentina) y Vittek (Eslovaquia).El 'Guaje' le metió dos a Honduras, uno a Chile y otro a Portugal.

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Publicado el 30 de junio de 2010 a las 11:15.

Todos los periódicos españoles de información destacan, en mayor o menor medida, la victoria de España sobre Portugal en sus portadas. La celebración de Villa tras marcar el decisivo 1-0 que ha metido a la Roja en cuartos de final del Mundial de Sudáfrica acapara todas las fotografías relacionadas con la noticia. Ya sea en primer plano, con gesto exultante, de rodillas en las proximidades del córner o rodeado de sus compañeros, el 'Guaje' se ha convertido en el héroe nacional de una selección que mantiene vivo un sueño, término muy utilizado para destacar las sensaciones provocadas por la Roja.

'España comienza a soñar' (El País), 'El sueño sigue vivo' (ABC) o 'Villa relanza el sueño de España' (El Mundo) constituyen las propuestas informativas que se refieren al anhelo oculto de la Roja: la consecución del Mundial. El camino también aparece como otra metáfora perseguida por la selección española en la portada de Público: 'Villa marca el camino'. Otros medios como La Razón ('Villa sentencia') o el Periódico de Catalunya ('Villa elimina a Ronaldo') relacionan el nombre del asturiano con el de Cristiano Ronaldo o simplemente ensalzan el tanto del 'Guaje'. Mucho más si cabe, los medios asturianos. Sirva de ejemplo el 'Villa manda a Ronaldo a casa' de la Nueva España. La Vanguardia entiende que el gol dio confianza a la Roja, el Periódico reconoce el estilo de Barça en la victoria y las referencias a la superación de la muralla defensiva portuguesa surgen en Público, Marca o Sport.

Evidentemente, los periódicos deportivos proponen los titulares más eufóricos y propios del aficionado. 'Esta es mi España' (ya está en cuartos pero cuidado que aún no hemos ganado nada)' ha sido la propuesta elegida por Marca. Según el rotativo, España 'recupera el ritmo y el toque que la hicieron la mejor del mundo'. Por su parte, As se apodero de un término taurino para definir a los jugadores españoles: '¡Toreros!'. 'España bailó a Portugal y pasó con otro gol de Villa. La perfección llegó con el cambio de Llorente por Torres', añade. El Mundo Deportivo califica el triunfo como '¡Genial!' para definir el gran partido de la Roja, liderada por el 'pichichi' del Mundial.

Marcos Blanco

marcos@gentedigital.es

Publicado el 30 de junio de 2010 a las 10:15.

David Villa, autor del gol ante Portugal que ha clasificado a España para cuartos de final en el Mundial de Sudáfrica, estaba exultante y precavido tras el triunfo de la Roja. "Vamos pasito a pasito", señala el delantero asturiano, consciente de que "hemos dado un paso muy grande" por haber "dejado atrás a un rival muy difícil". El '7' de la selección español ha asegurado tras el choque de octavos que "nunca hemos perdido la confianza. Sabemos el potencial que tenemos, el que podemos dar", añadió el autor de cuatro goles durante el presente campeonato futbolístico.

En lo personal, Villa ha jugado frente a Portugal "uno de mis partidos más felices" por el hecho de que su tanto posibilitase la clasificación para unos cuartos de final en un Mundial. El objetivo del 'Guaje' está claro: "seguir marcando como hoy (por ayer)". El jugador español tuvo palabras de cariño para la afición. "Notamos que nunca nos han dejado pese a los contratiempos", como el sucedido ante Suiza. En cuanto a Paraguay, próximo rival de la Roja el próximo sábado, David Villa define a los guaraníes como "otro rival difícil, pero tenemos tiempo para descansar y a trabajar para estar en semifinales".

DEL BOSQUE: "SI JUGAMOS ASÍ, ES DIFÍCIL QUE NOS GANEN"

Vicente del Bosque, seleccionador español, manifiestaba su satisfacción al término del partido con el partido de los suyos. "Nos hemos sentido cómodos. Hemos estado muy atentos en todos los aspectos defensivos y cuando hemos tenido el balón, hemos creado peligro", señalaba el técnico salmatino.

Del Bosque comprende que "si jugamos así, es difícil que nos ganen". Además, reflexiona sobre el recorrido psicológico de su equipo. "Interiormente, sabíamos que estábamos bien, que hemos trabajado bien y ellos (por los jugadores) quieren hacer un poco de historia. A ver si tenemos suerte y por lo menos estamos entre los ocho mejores", concluyó el máximo responsable técnico de la Roja ante las cámaras del Telecinco.

M.B.

marcos@gentedigital.es

Publicado el 30 de junio de 2010 a las 09:30.

Los jugadores más anónimos han hecho un partidazo. Esta conclusión, realizada por Vicente del Bosque, a la conclusión del España-Portugal que mete a la Roja en cuartos, hacia referencia a gente como Sergio Ramos, Busquets o Capdevila. Y Fernando Llorente también forma parte de la lista. "Es un jugador especial y el partido estaba para él. Necesitábamos un delantero que protegiera y aguantará el balón para que la gente llegara desde atrás con peligro. Nos venía bien cambiar a un alto por otro para mantener el dibujo", señaló el técnico en referencia a su cambio por Fernando Torres, poco acertado en sus 56 minutos de juego.

La aparición de Llorente supuso un gran acierto táctico por parte de Del Bosque y un revulsivo para España. Tuvo una ocasión nada más salir, estuvo muy participativo y también pudo marcar en una segunda ocasión. Fue un futbolista decisivo. Así lo entendió Villa, quien aseguró que su entrada le dio al equipo "más espacios". También Sergio Ramos. "Llorente ha dado un poco de aire al equipo y ha aportado mucho", declaró el lateral derecho español a los medios de comunicación. Hasta Luis Aragonés, ex seleccionador de España, consideró acertada la aparición de Fernando en el terreno de juego porque "nos dio más profundidad".

A sus 25 años, el futbolista del Athletic ha demostrado una vez más su valía para jugar en la selección española y la categoría que posee como uno de los mejores delanteros nacionales. Llorente debutaba en competición oficial con España ante Portugal en su sexto partido como internacional y estuvo a un gran nivel durante los 34 minutos que tuvo, aunque no pudo marcar su cuarto gol con la Roja. El '14' de España debutó en noviembre de 2008 con el combinado nacional de fútbol en un partido contra Chile que se jugó en Villarreal.

Marcos Blanco

marcos@gentedigital.es

Publicado el 30 de junio de 2010 a las 09:30.