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La línea 1 del tranvía entre Eras de Renueva y Puente Castro está en marcha. Si todo sale como ha proyectado el equipo de Gobierno este mismo año comenzarán unas obras presupuestadas en 84 millones de euros y que se ejecutarán en 18 meses. Es decir, el tranvía estaría operativo en la campaña de las Municipales de 2011. Ahora es el tiempo de las alegaciones para una iniciativa arriesgada, pero que sus promotores contemplan como el acceso a la modernidad de la ciudad de León. Acciona, la empresa que realizó el Estudio de Viabilidad y recomendó el trazado de la primera línea, parte con ventaja para la adjudicación de las obras y la explotación de tan novedoso y ecológico transporte. Llama la atención la gran divergencia de opiniones entre el equipo de gobierno y la oposición. No hay quien entienda al PP; por un lado critica la apatía de los concejales de PSOE y UPL porque a punto de llegar el ecuador de la legislatura no hay promesas cumplidas; y, por otro, les acusan de tener prisas. Da la impresión de que la única estrategia popular es poner trabas para alargar proyectos largamente anunciados para que sigan en pañales en 2011. Evidentemente, esto sería bueno para el PP, pero muy malo para la ciudad de León y más con la crisis que nos asedia. Así las cosas, el alcalde tiene ante sí un gran reto: cumplir el pacto de legislatura con la UPL. Si cumple, y utilizando sus propias palabras, la oposición no va a ganar para disgustos, pero si no cumple las urnas le pueden pasar factura.
Publicado el 4 de mayo de 2009 a las 14:45.