Un Palacio con buenos cimientos
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El Gobierno de España ha gestionado de manera bastante torpe el aplazamiento de la firma del convenio para la financiación del Palacio de Congresos y Exposiciones de León. A estas alturas de la película todavía aventuramos un final feliz, confiando en que sea cierto lo que dicen desde Moncloa de que sólo es un retraso en la firma por motivos burocráticos, pero que a la larga permitirá acelerar las obras de tan importante proyecto para el futuro de León. Si es así, el Gobierno ha vendido muy mal su compromiso con el Palacio de Congresos y se ha llevado todas las críticas. Tiempo al tiempo. Nadie contaba con este contratiempo y más cuando es una promesa del propio Zapatero tras el Consejo de Ministros celebrado en León en julio de 2004. Para mí éste es el gran problema, que en más de 5 años, con el proyecto hecho, con más de 5 millones de euros adelantados por el Gobierno, con algunas obras en marcha... no se haya firmado un convenio de financiación entre el Ministerio de Industria, la Consejería de Fomento y el Ayuntamiento de León. Repito, han pasado 5 años y tres meses desde el anuncio de un proyecto diseñado por Perrault y que ha sido expuesto hasta en París y Madrid. La Junta ha ratificado su apoyo y es ahora el Gobierno el que tiene que garantizar su compromiso para que el proyecto se licite incluso este mismo año, como estaba previsto. La Junta, a través de su consejero de Fomento Antonio Silván, ha estado en su sitio poniéndose incluso a disposición del Ayuntamiento para firmar en solitario y adelantar aportaciones para que el proyecto no se vaya al garete. Otros cargos del Partido Popular sacaron demasiado pronto la lengua a pasear. Ni el alcalde ni el propio Zapatero han hablado. Quizá tengan un as en la manga que revierta al proceso a la línea que nunca se debió traspasar. Ya lo dice el refrán, que quien ríe el último, ríe mejor... Da la impresión de que en breve más de cuatro tendrán que rectificar. Repito que, de momento, la historia va más camino de un final feliz que trágico. A ver cómo se reacciona si todo vuelve a su cauce y el Palacio de Congresos luce sus esplendorosos cimientos con el patrocinio del Ayuntamiento de León y el apoyo -ahora más total- de Zapatero y Antonio Silván, o lo que es lomismo del Gobierno y de la Junta; lo mismo que en Michaisa.
Publicado el 17 de noviembre de 2009 a las 13:30.