El Instituto Confucio
Pues sí, ya está aquí. El Instituto Confucio ya es una realidad en León y abre a la ciudad y a la provincia un nuevo horizonte hacia el país más poblado del planeta. Mucho se ha trabajado desde León para conseguir traer al ‘quinto Confucio’ de España a una ciudad de tamaño pequeño como es León.Probablemente, este final feliz no habría sido posible sin el empeño del presidente del Gobierno, el leonés José Luis Rodríguez Zapatero, y así lo reconoció con elegancia y gratitud el alcalde de León, Emilio Gutiérrez. Ahora toca ponerse a trabajar en serio codo con codo con la Universidad de León para consolidar los dos logros conseguidos en el último año en materia de turismo idiomático: la sede de la Universidad de Washington y el Instituto Confucio; o lo que es lo mismo, tener vínculos culturales y económicos probablemente con los dos países más poderosos: Estados Unidos y China.
Estamos en un momento económico muy duro, tan difícil que urge un pacto de partidos para que la recuperación económica esté muy por encima de los intereses partidistas y electorales. De ahí que no se entienda que los partidos puedan dedicarse a poner ‘chinas’ en el camino para fastidiar al contrario. Poner en riesgo la solemnidad de la inauguración del Instituto Confucio con la excusa de las elecciones no es de recibo. Menos mal que al final reinó la cordura y el PP retiró el recurso de la Junta Electoral. De ahí que haya que volver a destacar la elegancia de algunos políticos que no tienen reparo en reconocer el trabajo de otros en el fruto que le toca recoger. Y de ahí también que no se entienda muy bien que 6 concejales socialistas -con lo que luchó el PSOE la pasada legislatura para traer el Instituto Confucio a León- no acudieran al Salón de Plenos de San Marcelo a la recepción oficial que el Ayuntamiento ofreció a la delegación china y de Xiantang. No vale la excusa del recurso electoral del PP. Son concejales de León y lo mismo que estaban en el Auditorio deberían de haber estado en San Marcelo.
Polémicas aparte, lo importante es que una vez en León, el Instituto de Confucio tiene que convertirse en el éxito que exige el guión. Es una gran oportunidad.
Publicado el 14 de octubre de 2011 a las 09:15.
