¿Dinamitar el futuro?
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El equipo de gobierno del Ayuntamiento de León ha buscado con su ¡Vamos León! dar un empujón a optimismo asentado en pilares de la solidez del Palacio del Conde Luna, sede de la universidad de Washington y que será inaugurado por los Reyes el 4 de mayo, el Palacio de Congresos, cuyas obras cofinanciadas por Gobierno y Junta comenzarán este mes; el tren de alta velocidad, la autovía León-Valladolid, Michaisa o la nueva Terminal del aeropuerto, obras que van más lentas de lo previsto por culpa del lluvioso invierno; la integración de FEVE y su alianza con el tranvía; el proyecto juvenil Vías, que será inaugurado dentro de un mes por la ministra de Igualdad; y otras obras ‘añadidas' como la atrevida remodelación del Hostal de San Marcos cuyo proyecto verá la luz los próximos días y será otro de los puntos del maridaje perfecto entre historia y modernidad de una ciudad que se agarra con fuerza para no perder el tren del futuro. Pero no será un camino de rosas sino más bien lleno de espinas y zancadillas. Así, la sentencia por la irregular subida del IBI en 2008 no ha llegado en el mejor momento. Cumplir la palabra de devolver lo cobrado ilícitamente supone tener que ‘arañar' 8 millones de euros de unas arcas municipales en precario. Ayuntamiento y Diputación librarán una batalla tan feroz como la que León vive con el alcalde de Valladolid. En juego está el decidir judicialmente quién tiene que pagar os más de 5 millones de euros a los 74.112 contribuyentes que reclamaron contra la subida del IBIY de 2008, declarado ilegar por no publicarse antes de acabar 2007 (el BOP lleva fecha de 31 de diciembre de 2007, pero salío publicado el 3 de enerode 2008). El Ayuntamiento dice que la culpa es dela Diputación por publicar tarde el Boletín y la Diputación que lo hizo dentro del plazo legal de 6 días que tiene para los asuntos urgentes. Un galimatías. Se supone que de hacerse firme la sentencia,a el Ayuntamiento de León deberá pagar en cualquier caso los otros 3 millones de euros para los contribuyentes que no recurrieron la decisión municipal y a los que el alcalde se comprometió a devolver lo indebidamente cobrado por aquello de la igualdad fiscal.
Por si esto fuera poco, quedan por lidiar toros de la bravura de la línea Sama-Velilla o el cementerio nuclear en la frontera leonesa. ¡Vaya final de legislatura que nos espera! Y todo ello con la que está cayendo. En vez de buscar sendas comunes para adelantar la recuperación, nos perdemos en batallitas políticas de nula efectividad y productividad. Es un poco triste ¿no? Tirarse los trastos a la cabeza para buscar rentabilidad política... y luego hablan de los ciudananos como que realmente les importaran...
Publicado el 10 de marzo de 2010 a las 09:30.
