A río revuelto...
Qyizá sean muchos los leoneses que asistan atónitos al espectáculo mediático montado en torno al sector empresarial, salpicando también a Caja España. De todos es sabida la pésima situación que estamos viviendo desde hace ya bastantes meses con caídas de empresas del prestigio y la solvencia de Begar o Teconsa, ambas en concurso de acreedores lo mismo que la agrupación empresarial Agelco. Sus deudas superan con creces los 100 millones de euros. Hasta aquí todo normal. Un empresario decide hacer unas invesiones en suelo y en construcción de viviendas y de repente se ‘pincha’ la burbuja inmobiliaria y puede llevar a las empresas a la quiebra porque las deudas superan con mucho los ingresos, aparte de que el patrimonio se devalúa por la bajada del precio del suelo y de las viviendas y los bancos cortan el grifo del crédito. Es la ley de la oferta y la demanda: unos aguantan el tirón y otros no pueden porque han acaparado demasiado. Lo que no es normal es que se aprovechen estas circunstancias para ‘cobrar facturas pendientes’ intentando ridiculizar y hundir al contrario. Sacar ahora viejos trapos sucios no conduce a nada y menos si en la guerra se mete también a Caja España en un momento tan decisivo cuando la propia Caja y León se juegan el papel que jugarán en la nueva entidad financiera que nacerá de la fusión, integración o lo que sea de la propia Caja España, Caja Duero y Caja Burgos. El proceso de fusión está resultando largo y complicado. Se habló de septiembre, luego de octubre y ahora... se dice que la nueva Caja no empezará a operar hasta el 1 de abril de 2010 o quizá el 1 de julio; es decir, en el segundo semestre del año próximo. Contentar a todos va a ser tarea difícil, pero da la impresión de que Caja España parte con ventaja para convertirse en la sede social de la que curiosamente podría llamarse ‘Caja Castilla y León’ y no parece de recibo que sea desde León desde donde más se trate de cuestionar su indiscutible liderazgo, con una marca que ya es en sí mismo un activo espectacular de cara a las fusiones interregionales que se avecinan (Caja Cantabria ya anda buscando ‘novia’). Y aquí, en vez de sumar a enturbiar el río. ¿Interesará pescar entre tanta suciedad? La batalla por el poder no tiene límites.
Publicado el 23 de octubre de 2009 a las 09:15.
