El impulso de la Diputación
Decía el ex ministro leonés, Rodolfo Martín Villa, al que atribuyen la paternidad de la macrocomunidad de Castilla y León, que concibió en plan descentralizador en el que habría un ejecutivo y un legislativo ‘central’ y donde el papel principal lo tendrían las 9 Diputaciones. Es decir, contemplaba una autonomía descentralizada con unas diputaciones fuertes y con poder de desarrollo provincial y evitando así los desequilibrios territoriales de la comunidad más extensa de Europa.
Pues nada de eso se hizo. Primero en tiempos del socialista Demetrio Madrid se crearon las delegaciones provinciales de cada consejería y después, con José Mª Aznar, se suprimieron éstas creando la figura de la Delegación Territorial única con un ‘superdelegado’ -con poco poder, por cierto- al mando. En definitiva, se creó otra estructura administrativa nueva ‘pasando’ de las diputaciones y fomentando un nuevo centralismo en Valladolid. Ni siquiera adaptó la administración a la birregionalidad de la Comunidad creando, por ejemplo, una vicepresidencia para León; ni mucho menos se tuvieron en cuenta peculiaridades históricas como el Fuero de León de 1027 o las históricas Cortes de León de 1188.
Eso sí. La Diputación de León y los ayuntamientos se tuvieron que hacer cargo de competencias impropias porque la Junta, lejos de buscar el equilibrio territorial y ejercer sus competencias, se empeñó en engordar su administración marginando a provincias como León. 34 años después, León sigue sin el Conservatorio que sí ha hecho en otras ciudades y que aquí corrió a cargo de la Diputación hasta hace sólo unos años y todavía ahora se imparte en un edificio de la institución provincial. Si todo va bien antes de los 40 años de autonomía tendremos el Conservatorio ‘autonómico’ tras décadas detrayendo fondos provinciales para ‘cosas de la Junta’. Lo mismo pasó con el centro siquiátrico de Santa Isabel o sigue pasando con centros de educación especial como Cosamai, en Astorga, o Nuestra Señora del Valle, en La Bañeza. Ahora la Diputación prepara un plan de Parques Provinciales de Bomberos con 8 millones de inversión y un de 4 millones/año. La Junta ni está... ni se la espera... Tampoco ha vuelto su aportación a los planes provinciales de obras, ya que aprovechó la crisis para ‘escapar’... Ni siquiera la Junta se volcó en las cuencas mineras cuando recibió ‘pasta’ en abundancia.. Se invirtió poco y mal. ¿Dónde fue el dinero? Y si queremos vuelos, ahí están la Diputación y el Ayuntamiento... Decía el ‘reconvertido’ Joaquín Otero ¡¡en 2006!! que León había perdido 5.370 millones de euros por estar unida a Castilla. Así nos va de mal...
Publicado el 7 de julio de 2017 a las 09:00.