Las lecciones de aquel mágico 2010
2010 fue el año en el que la crisis económica llegó de lleno a España. Zapatero, entonces presidente del Gobierno, se vio forzado a poner en marcha duros recortes y ajustes con subidas de impuestos (el IVA entre ellos), bajada del sueldo a los funcionarios, congelación de las pensiones (a excepción de las mínimas que sí subieron), elevación de la edad de jubilación de 65 a 67 años así como la desaparición de medidas de política social como el ‘cheque bebé’... Pero en León parecía que la crisis ni se aventuraba. 2010 era año preelectoral y, además, se celebró el 1.100 Aniversario del Reino de León con la presencia en León de los Reyes para la inauguración del renovado Palacio del Conde Luna, la visita al Panteón de los Reyes de León en San Isidoro y la participación en los actos del citado 1.100 Aniversario con un discurso del Rey Juan Carlos I en el que ya se sentenciaba que León era la Cuna del Parlamentarismo con las Cortes convocadas por el Rey Alfonso IX en 1188 y celebradas en el Claustro de San Isidoro. La Reina volvió en septiembre e inauguró el Centro de Alzheimer; un mes en el que los entonces príncipes Felipe y Letizia también se acercaron a León para inaugurar en Botines la exposición ‘Los beatos’.
Pero hubo muchas más cosas ese año en León, de muchas de las cuales no se ha sacado el provecho necesario. Se inaguró un aeropuerto de primera, aunque con vuelos de tercera; pues ahora todavía hemos bajado más de categoría y casi no hay ni vuelos. Se diseñó la integración de Feve con trenes tren-tran a corto plazo... y seguimos esperando que acabe. Se proyectó el Centro Logístico de Torneros con firma del consejero Silván y la ministra Beatriz Corredor con una inversión de 80 millones de euros y la previsión de crear 3.000 empleos... y estamos esperando la primera piedra. El ministro José Blanco confirmó el Centro del Control del Ave en el Noroeste; el edificio ya está terminado, pero sigue esperando tener trabajadores y que le encomienden alguna misión...
Pero 2010 también trajo a León iniciativas culturales y universitarias de gran calado. Y menos mal que éstas, con menos dinero, van dando mejores frutos. Se trata de la llegada a León de la Universidad de Washinton, que estableció en la capital leonesa su segunda sede europea tras Roma. Más de 500 alumnos estadounidenses han pasado en estos cinco años por las aulas de la UW, pero se espera un empuje mayo pues sólo en lo queva de año han venido 170 estudiantes y quedan casi siete meses. Y en octubre de 2010 se inauguró el Instituto Confucio de la Universidad de León abriendo un puente entre culturas. Ambas instituciones cumplen en 2015 cinco años en León con un balance positivo, pero con un futuro más que prometedor por la progresión de estudiantes que se incorporan a dichos planes. Costó traer a estas instituciones y se logró por la implicación de todas las instituciones. Ahora, a pesar de tanto revuelo político, es el momento de dar apostar decididamente por iniciativas que pueden dar mucho costando poco. A ver qué hacen los nuevos dirigentes...
Publicado el 5 de junio de 2015 a las 09:45.