Relevo en la Subdelegación del Gobierno
Llevamos ya décadas de democracia y de lucha por la igualdad entre hombres y mujeres. Muchos son los pasos que se han dado como demuestra que las mujeres ocupan muchos puestos de responsabilidad en empresas y en la administración pública. Sin embargo, todavía es noticia que una mujer llegue por primera vez al mando de una institución de primera línea. Hace poco más de un año (enero de 2014) fue María Marcos la que se convertía en la primera comisaria de la Policía Nacional en León y ahora es Mª Teresa Mata Sierra la primera mujer que se pone al mando de la Subdelegación del Gobierno en León tras ser nombrado su antecesor, Juan Carlos Suárez Quiñones, delegado del Gobierno en Castilla y León. Hace años fue Isabel Carrasco (asesinada en mayo de 2014) la que tuvo el honor de ser la primera presidenta del PP, primero, y de la Diputación, después. Y hasta vimos como Carmen Chacón, en tiempos de Zapatero, se convirtió en la primera ministra de Defensa. Pero todavía nos quedan por dar noticias sobre la llegada de una mujer a la cúpula de algunas instituciones. Tanto la primera alcaldesa de León o la primera presidenta de la Junta de Castilla y León parece que tardarán todavía en llegar, a tenor de lo que presentan los partidos y las previsiones que ofrecen las encuestas. Pero no hay que olvidar que vivimos unos tiempos especialmente revueltos y que lo que hoy vale,... mañana ya es viejo. Ahí está el propio caso de Mª Teresa Mata, feliz por su séptimo puesto en la lista de Silván al Ayuntamiento de León y que en cuestión de días se convirtió en la primera subdelegada del Gobierno en León. Una mujer bien preparada en el aspecto jurídico -algo muy necesario en su nuevo cargo- y con experiencia en gestión pública como secretaria general de la Universidad de León (2000-2007) y como secretaria de la Consejería de Hacienda (2007-2009). Y también tiene experiencia en medios de comunicación, aunque sólo sea desde su participación en tertulias de radio. Sólo un lunar: su paso por la Universidad de León en tiempos de Ángel Penas, en la época de mayor bonanza en la ULE. Pero ya sabemos el resultado final: de obtener superávit a descubrir una deuda cercana a los 30 millones de euros. Claro, que los tiempos han cambiado una barbaridad...
Publicado el 17 de abril de 2015 a las 09:30.