El Partido Popular de León y el grupo de diputados del PP en el Palacio de los Guzmanes han apostado por Emilio Orejas, alcalde de Valdelugueros y diputado de Deportes, para enderezar el ‘rumbo’ de una legislatura marcada por la tragedia (Isabel Carrasco fue asesinada el 12 de mayo de este año) y el sorprendente encarcelamiento el 27 de octubre de Marcos Martínez acusado de corrupción. Lupicinio Rodrigo, que ha ejercido estas semanas como presidente en funciones dado su cargo de vicepresidente primero, ya ha marcado algunas de las pautas de transparencia que tendrán que ser la bandera del mandato de Emilio Orejas de unos ocho meses, dado que en mayo habrá elecciones municipales y saldrá un nuevo equipo de gobierno. Así la Diputación acabará con las invitaciones cerradas a las empresas y las adjudicaciones de obras serán públicas a través de concursos publicados en el Boletín Oficial de la Provincia. Pero tendrán que ser muchos más los gestos que Emilio Orejas ponga en marcha desde este mismo viernes 14-N nada más tomar posesión de su cargo de presidente de la Diputación. Los partidos de la oposición han encontrado una inesperada munición contra el PP con la detención de Marcos Martínez y la libertad bajo fianza de 30.000 euros del interventor, Jesús López. Ahora mirarán con lupa tanto la gestión pasada marcada por el personalismo y el sectarismo de Isabel Carrasco, como los ‘breves’ meses de Martínez, pero ahora con Emilio Orejas como objetivo. A sus 39 años, a Emilio Orejas le llega una oportunidad política de oro, pero también llena de zancadillas y amenazas porque los partidos de la oposición no sólo estarán pendientes de su gestión como presidente sino que bucearán en su currículum político en busca de hechos que echar en cara al nuevo ‘jefe’ del Palacio de los Guzmanes. La restauración de un monumento franquista o un problema en el censo de Valdelugueros son los primeros ataques. Rastrear el pasado no conduce a nada, sólo a guerras políticas que sólo sirven para paralizar y emponzoñar la institución. Y con la que está cayendo habría que dar prioridad a luchar por salir de la crisis antes que buscar cargarse a un presidente o lograr un puñado de votos.
Emilio Orejas nació en Lugueros en 1975, un año clave para España al morir Franco y comenzar a soñar con un horizonte democrático que pronto encontró su cauce en la sociedad española. En 2003 fue elegido alcalde de Valdelugueros, cargo en el que curiosamente sustituyó a su padre tras 32 años en el puesto. Ahora será el noveno presidente de la Diputación desde la vuelta de la democracia (tras Julio César Rodrigo de Santiago (UCD, 1979-1983, fallecido en enero de 2009, y que había tomado el relevo de Emiliano Sánchez-Lombas), Manuel Cabezas (PSOE, 9 de junio 1983 a 22 de febrero de 1984), Alberto Pérez Ruiz (PSOE, 1984-1991, fallecido el 28 de mayo de 2014), Agustín Turiel (PSOE, 1991-1995), José Antonio Díez (PP, 1995-2003), Javier García Prieto (PP, 2003-2007), Isabel Carrasco (2007-12 de mayo de 2014 cuando fue asesinada) y Marcos Martínez (30 de mayo al 11 de noviembre de 2014).Suerte...
Publicado el 14 de noviembre de 2014 a las 09:15.