La nueva entrega de Michael Connelly
Archivado en: Cuaderno de lecturas, Michael Connelly
En los más de 25 años transcurridos desde que Harry Bosch se diera a conocer entre los lectores en El eco negro (1992), este detective del Departamento de Homicidios de la policía de Los Ángeles creado por Michel Connelly ha cambiado tanto como el resto del mundo. Tan ha sido así que, en su nueva entrega, Del otro lado, Harry -ya tocado por la edad y habiendo colgado la placa, se alía con su hermanastro-, Mickey Haller, el abogado del Lincoln. Recién llegada a las librerías españolas, la novela inaugura la colección Alianza de Novelas, una nueva iniciativa de Alianza Editorial, nacida con el anhelo de llevar "al lector una propuesta plural, tanto en géneros como en autores". Considerando que Connelly es uno de los escritores más vendidos de todo el mundo, no hay duda de que el público responderá con creces a las expectativas puestas en esta nueva aventura.
"Nunca imaginé que Harry viviría 25 años", confiesa Connely. "Sin embargo, cuando comprendí que iba a ser así, llegué a la conclusión de que no podía ser uno de esos personajes que permanecen inmutables de cara al lector, que tenía que ir cambiando y envejeciendo a medida que lo hacía Los Ángeles". Y esas nuevas circunstancias, que con tanta frecuencia llevan a tanta gente a ser lo que negó, hacen que, en esta nueva historia, Harry Bosch tenga que trabajar para esa defensa que sigue siendo su hermanastro. Es inútil que al hacerlo sienta que con ello tirara por tierra su trabajo durante tres décadas en el departamento de homicidios.
"La novela negra gusta porque, por más complejos que sean sus argumentos, acaba por poner un orden a la caótica visión que nos ofrece el mundo", estima Connelly respecto a la inagotable avidez de los lectores por estas ficciones. "La novela criminal también es un indicador del estado de la sociedad. En mi caso, ambiento cada una de mías en el año en que las escribo. De este modo puedo retratar la inmediatez, los diversos aspectos culturales y sociales de una época. Harry, como tantos millones de personas, está en contra del muro que quiere levantar Trump".
Aunque los títulos de Michael Connelly se suceden con una regularidad casi anual y en una primera apreciación, como en la vida misma, parezca que el tiempo no pasa en tan corto espacio, ¡vaya si lo hace! Hasta el crimen ha cambiado en ese cuarto de siglo que Harry Bosch lleva luchando contra él. "No sé si los criminales ahora son más temibles que antes. Pero sí que se han sofisticado. Internet ha vuelto el mundo más pequeño y ha posibilitado nuevos delitos. También habría mucho que hablar sobre la influencia que la televisión ejerce sobre los asesinos en serie".
Dentro de esa tónica del autor, que reconoce sentirse seducido por el envejecimiento de su personaje y las posibilidades que esto le brinda para dejar constancia de la contemporaneidad, la siguiente aventura de Harry Bosch, The Wrong Side of Goodbye -que en los próximos días llegara a las librerías estadounidenses- aborda "las complicadas relaciones entre la policía y ciertas comunidades, que se han visto afectadas especialmente por los agentes en los últimos meses".
Aunque también ha escrito guiones televisivos sobre su detective, Connelly considera que el medio de Harry Bosch es la novela. "Leído se percibe de forma diferente, lo que hace que concibas la historia en base a dicha diferencia. En la televisión es muy difícil meterte en la cabeza de un personaje". Literario hasta médula, aún reconoce que sigue volviendo a Raymond Chandler -deidad y referencia de todo relato criminal- con el mismo afán que lo hacía en su adolescencia. Respecto al olvido en que ha caído Dashiell Hammett, el otro autor cardinal de estas ficciones hace treinta y tantos años, cuando empezó su boom, considera que "no es atractivo para los jóvenes".
Publicado el 16 de noviembre de 2016 a las 11:30.