Archivado en: Tony Judt, Gran Hermano, Paul Krugman
Acabo de terminar de leer Algo va mal, del historiador británico Tony Judt, y estoy aún sacudido por la emoción. No es un libro emocionante, pero me emocionan cada vez más la lucidez, la transparencia y la capacidad de ordenar las cosas con sensatez y contención. Leo a Lluís Basset citando a Paul Krugman: "Cuando los historiadores contemplen retrospectivamente los años 2008 a 2010, creo que lo que más les desconcertará será el extraño triunfo de las ideas fallidas. Los fundamentalistas del libre mercado se han equivocado en todo, pero ahora dominan la escena política más aplastantemente que nunca". Ése es el punto de partida de Algo va mal. La radiografía de una sociedad sin discurso moral, anestesiada, entregada a las ceremonias del becerro de oro en todas sus formas y colores. Una sociedad en la que se llama democracia de manera recurrente al mero cálculo de las mayorías: las audiencias, las ventas, los votos. La diversidad, el respeto a las minorías, la interlocución con los grupos diferentes o la búsqueda de la cohesión social mediante la reducción de las brechas que existen en el reparto de la riqueza o en el acceso a la educación, han desaparecido sencillamente del discurso o se han convertido en puro papel mojado, en retórica hueca.
Hoy leo en el periódico que Tele 5 va a sustituir CNN+ (la cadena que Prisa ha decidido cerrar dada su falta de rentabilidad) por un canal de Gran Hermano. Veinticuatro horas de Gran Hermano. Las cámaras de la casa enchufadas todo el tiempo y Mercedes Milá haciendo resúmenes y entrevistas para agitar la coctelera. Reemplazamos CNN+ por Gran Hermano-24 horas. Es inevitable reconocer el mundo en el que algo va mal. El mundo en el que la democracia -o su sucedáneo- se construye cada vez más sin información o con la información manipulada, en el que el debate o la discusión argumentada se sustituyen por el adocenamiento o la demagogia, en el que se llama cultura a www.seriesyonquis.com y cosas semejantes, en el que a muy poca gente le inquieta que Mercedes Milá, otrora agitadora, sea ahora un icono de la basura.
Lean al menos a Tony Judt.
Publicado el 27 de diciembre de 2010 a las 14:15.