Botellón y tapas en los Sampedros 2009
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No lo llamábamos botellón. Y bebíamos menos... en calles y jardines. Era el tiempo de la peseta. De vez en cuando comprábamos priva en los supermercados, pero íbamos más de bares y, de ciento en viento, a discotecas, a bailar lentos si se terciaba. ¿Parezco un abuelo? Hablo de los ochenta.
No lo llamábamos botellón. Y no éramos, todo hay que decirlo, tan guarros. O eso creo, que la memoria es selectiva.
Margen izquierda del río Arlanzón, en Burgos, a la altura de la mole que están construyendo para albergar el Museo de la Evolución Humana, este sábado a las diez y media de la mañana. Mientras sacaba la foto, con el teléfono, un señor le decía a otro: "¡Es la vergüenza padre!"
El mismo lugar, cuarenta y cinco minutos más tarde. He correteado hacia Fuentes Blancas un rato, sorteando cristales, cartones de vino y bolsas, mientras los basureros municipales curraban a destajo.
P.D.: A petición del gran Blogófago, que en Brgs.es ya ha colgado el vídeo del pregón de Óscar Equivias, primera valoración de las tapas: anoche cayeron media docena, pero el pincho que más nos gustó lo comimos en un bar, en La Favorita. La primera zampada estas fiestas, un notable, sencilla pero sabrosa: el langostino ibérico de la Casa Regional de Salamanca, en la Plaza de España. Allí comimos dos o tres más, en otras casetas, que ya he olvidado. En General Santocildes la sopa de guisantes y naranja en texturas tiene su punto, pero me da que no conviene maridarla con el calimocho.
En Twitter podéis encontrar información sobre las fiestas burgalesas buscando #Sampedros2009
Publicado el 27 de junio de 2009 a las 13:00.
