Nuria Labari: "Los sentimientos modernos navegan por la Red"
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Nuria Labari (Santander, 1979), escritora y redactora jefe de telecinco.es, estudió Ciencias Políticas, Relaciones Internacionales y Creación Literaria. Tras pasar por las revistas La Modificación y Marie Claire, y por elmundo.es (donde coincidimos, se puede entrevistar a amigos, ¿no?), colabora con la Escuela Contemporánea de Humanidades (ECH) y acaba de publicar su primer libro, Los borrachos de mi vida, VI Premio de Narrativa Caja Madrid (Lengua de Trapo).
Mantuvimos esta entrevista chateando ayer en Facebook. Esta vez me ha costado colocar un titular. Cualquiera de estos quizá sean mejores que el elegido:
"Nadie ha invertido en el 'goce de la red'"
"Los prejuicios son para los ociosos"
"telecinco.es sigue siendo la primera web de televisión en España"
"Escribo para ganar mi vida y trabajo para ganarme la vida"
11:54 ¿Qué hace una chica como tú en un sitio como telecinco.es?
11:57 ¿Qué clase de aventura he venido a buscar...? Pues la verdad es que en telecinco.es se está trabajando sobre aspectos hasta ahora abandonados de Internet. Hasta ahora los medios han entendido bien las ventajas que puede tener la Red para informar. Se ha avanzado mucho en informar en distintos medios digitales y todos han aprendido, cada uno a su manera, a adaptar la revolución digital a una revolución de la información (inmediatez, participación, redes...). Sin embargo, el entretenimiento y el juego estaban aparcados de esta ecuación. En telecinco.es estamos investigando este otro camino. El camino del juego por decirlo de alguna manera. Este camino es muy interesante y crucial no sólo para el entretenimiento sino creo que también puede ser un camino de ida y vuelta para comunicar otro tipo de cosas. Internet aún tiene que explosionar en muchos ámbitos (el arte, la música, la cultura, la tele, el entretenimiento...). Y en esas estamos.
11:58 ¿Ha cambiado mucho tu trabajo en esta web si lo comparas con el que desplegabas en elmundo.es?
12:01 Bueno, mi jefa, Ana Bueno, sigue siendo la misma y eso es mucho. Y es clave. Al final un trabajo, el que sea, es un equipo, una forma de trabajar, de mirar, de entender el periodismo, Internet... Al final no creo que el medio haga al periodista (¡sálvanos, señor!) sino que el periodista crea, inventa, sueña, hace el medio. En este sentido la verdad es que no ha cambiado mucho mi trabajo. La escuela es la misma. Lo que ha cambiado es la portada, la home donde ahora publicamos y de alguna manera también la ambición. elmundo.es 'sabíamos' cómo hacerlo. Este proyecto es mucho más experimental. Todas las teles han empezado ahora y aún hay mucho horizonte.
12:02 ¿Cuáles son vuestros principales retos y dificultades? ¿Quizá os toca combatir unos cuantos prejuicios?
12:08 ¿Retos? Pues trabajamos en muchas direcciones. La primera y más importante sería la de profesionalizar de alguna manera la creatividad que ha estallado en Internet. Todo el que tiene talento tiene un vídeo colgado en la red, un blog, una página, un proyecto... Se están inventando nuevas narraciones, nuevas miradas, nuevos sentidos diría. Para hacer entretenimiento tenemos que estar muy atentos a lo que pasa fuera y aprender (e inventar) cómo un medio puede contribuir a esa creación que está ahí fuera. Las reglas no se han inventado. Nadie ha invertido en el 'goce de la red' diríamos, salvo los particulares. Nuestro principal reto es recoger toda la creatividad que hay ahí fuera y enriquecerla con un equipo de profesionales (esta es nuestra obligación). ¿Una dificultad? Que mientras hacemos esto tenemos que hacer la web más competitiva de televisión, entregando toda nuestra energía a cada programa y contenido de la tele. Al final somos un satélite de la tele y un nuevo motor al mismo tiempo. Con semejante dos en uno, la verdad es que no dedicamos mucho tiempo a los prejuicios. Los prejuicios son para los ociosos.
12:09 Podéis llenaros de orgullo por vuestra audiencia y, además, por el tiempo que los internautas navegan dentro de telecinco.es, ¿no?
12:10 Pues sí, la verdad es que ese es el mejor premio. Ahora mismo, como todo el mundo sabe, Telecinco ha perdido el liderazgo en las audiencias. Y, sin embargo, y a pesar de ello, telecinco.es sigue siendo la primera web de televisión en España. Estamos en el camino.
12:11 ¿Te has inspirado en Telecinco para alumbrar algunos de los relatos de Los borrachos de mi vida?
12:13 No, no. Primero porque están escritos antes de que empezara a trabajar aquí. Así que no, nada que ver.
12:14 ¿Deberíamos aclarar que se trata de una obra literaria, un libro de cuentos, que poco o nada tiene que ver con tus trabajos en Internet?
12:17 Sí, claro. Estos relatos son literatura pura y dura. En el sentido de que, con independencia de su calidad (que no soy yo quien va a juzgarla, faltaría más) están escritos con la ambición de provocar chispazos en la oscuridad. Diríamos que escribo para ganar mi vida y trabajo para ganarme la vida.
12:19 Para ser una ópera prima, has entrado en el mundo literario con muy buen pie: ganando un premio y con buenas críticas, ¿te esperabas algo similar?
12:25 La verdad es que no. Mi primer trabajo fue en elmundolibro (un portal de libros que hacía elmundo.es) y ya entonces me enteré un poco de cómo funcionaba el asunto. Los cuentos son en España un género minoritario que no vende y que muchas veces ni siquiera llega a publicarse. Así que bueno... era difícil imaginarlo. Además, antes de ganar este premio, perdí varias decenas de concursos (es verdad que presentaba cuentos sueltos). Pero vamos, el mejor de todos los relatos, o dos de los mejores, tienen un digno historial de fracasos. Perdieron en concursos de comunidades de vecinos, de Ayuntamientos, en concursos nacionales, internacionales... Y bueno, también ganaron. Verlos publicados es la mejor de las noticias, la verdad, porque uno escribe con la aspiración de ser leído. Pero estaba lista para continuar sin ver la luz. La escritura es una carrera de fondo. ¿No? Toma frase hecha.
12:25 El otro día Alejandro Gándara colgó El Escorpión el primer relato del libro. Supongo que habrás leído los comentarios a ese post. Hay quien dice que eres un corderito, comparada con Gándara, que es una apuesta arriesgada, sugerente, original y bien construida... La pregunta recurrente, para un autor novel, suele ser si estamos ante una obra con tintes autobiográficos.
12:31 Je, je... Y tan recurrente. Pues sí y no. Quiero decir, en ningún momento me he puesto a contar mi vida. Pero sí es verdad que cuando empecé a escribir me faltaba de todo. Me faltaban escenarios, nombres, calles, bares, zapatos, cielos, barbillas... Y es cierto que al principio estás muy pegado a tu experiencia. Necesitas territorios que domines porque claro, estás inseguro. Yo, por ejemplo, no me encontraba cómoda al principio según en qué escenarios. Me resultaba más fácil construir la acción cerca del mar (que es donde yo me crié) porque conozco esos cielos, ese aire, sé cómo huele... Ahora estoy escribiendo otra cosa y ya pasa en Berlín, Madrid, Marruecos... Y lo mismo es más autobiográfica pero lo parece menos. Yo creo que lo autobiográfico debería ser lo personal, lo íntimo, lo que los demás ni siquiera reconocen. Pero la gente encuentra en los accidentes (en las obviedades) cosas que creen que cuentan tu vida...
12:32 Saco de contexto una frase del segundo relato: "Como cualquier otro lugar sagrado, Internet no se ha de compartir con aquellos que no lo respetan". ¿Eso sólo lo escribe la narradora de ‘Ni siquiera adiós', o también lo comparte Nuria Labari?
12:37 Mira que me vas a hacer reír. Pues la verdad es que un poco sí lo comparto. Este cuento trata sobre una mujer que se enfrenta a varios abortos y encuentra cierto refugio en Internet. La verdad es que el espacio público se ha visto reducido y hay temas (la muerte, el aborto, la soledad, el cáncer, el miedo, la falta de erección, el deseo, el porno, la ansiedad por ser otro, la incomunicación con los tuyos...) que no tienen cabida en nuestra vida social y pública. Todos estos anhelos están en Internet. La gente puede decir la verdad en la red, confesar sus temores bajo un nick. Uno no sabe qué mundo late ahí hasta que husmea. En el caso del aborto y de la fertilidad es impresionante. Internet es una plaza pública de mujeres que se apoyan y se entienden mientras que los otros (maridos, madres, otros hijos...) las miran con gesto de sospecha... Los sentimientos modernos navegan por la Red. El relato lineal ha desaparecido.
12:38 Escribes con ritmo, muy apegada a nuestro tiempo, y dominas el género, no redactas, en esa carrera de fondo me da que continuaremos enganchados muchos lectores. Pero me parecen algo exageradas las primeras líneas de la contraportada: "Los relatos de Los borrachos de mi vida componen un detallado manual de instrucciones de cómo evitar el enfrentamiento con un mundo agresivo y complejo que exige siempre una respuesta, un reflejo rápido y efectivo". ¿Las suscribes?
12:41 Bueno, no las he escrito yo. Pero lo cierto es que en la editorial (Lengua de Trapo) son una gente estupenda y me hubieran dejado escribirlas si se me hubiesen ocurrido otras más acertadas. Las contraportadas de los libros son una cosa muy difícil. No sabría contar el mío pero tampoco otros... Es que si supiera contar Los borrachos de mi vida en un párrafo, pues me hubiera ahorrado 150 paginitas, ¿no? Y que otro tenga que intentarlo me parece una tarea difícil. No sé.
12:42 Vuelvo al principio, y así cerramos el círculo: ¿y qué hace una chica como tú en un sitio como la ECH?
12:46 La ECH (Escuela Contemporánea de Humanidades) es un verdadero lujo en mi vida. En esta Escuela yo he aprendido a entender la literatura como una forma de estar en el mundo. He hecho amigos. Y ahora mismo estoy en un seminario (los antiguos y nosotros) que parte de los textos clásicos (la Biblia el primer año, todos los textos griegos el Segundo, Roma el tercero...) para experimentar cómo sintieron las culturas de las que venimos. Cuando leímos la Biblia fuimos a Jerusalén, escuchamos música de entonces, leímos (claro), comimos como ellos... Son seminarios donde sentir el sentido. El sentido de entonces y el de hoy. La ECH es una de las experiencias más hermosas de mi vida, por decirlo en un titular.
12:46 En la ECH estáis de estreno: nueva sede y nueva web. ¿Qué tal lleváis el cambio?
12:51 Pues de maravilla porque han sido dos cambios para infinitamente mejor. La nueva sede tiene jardín y bar (dos elementos esenciales en nuestras vidas). Lo cierto es que es un placer de lugar. Por cierto, que cualquiera puede ir a leer o a pasar la tarde (hay sofás y librería...). La web (que está aún en pruebas) es una gozada. Está bien hecha, tiene un diseño estupendo y nos va a permitir una interactividad que antes no teníamos. La revolución web tiene que llegar también al conocimiento. La Wikipedia es lo más, pero tiene que haber mini wikis aquí y allí. Nosotros estamos especializados en creación y pensamiento. Y ese es un terreno virgen en Internet.
Publicado el 8 de mayo de 2009 a las 10:15.