El jabalí se expande en Madrid
Hasta hace poco las apariciones de estos animales se limitaban a las épocas de sequía. Algunos rompían o saltaban las verjas del Monte de El Pardo, se aventuraban a pasear por el hipódromo y llegaban a la M-30 o M-40 provocando situaciones de peligro. Otros bajaban a buscar agua junto a las urbanizaciones y era fácil verlos en calles de Las Rozas, Majadahonda o localidades cercanas.
"Siempre ha habido jabalíes, pero en los últimos tiempos se ha disparado el número", afirma Jesús Anchuelo, agricultor de la zona del Henares. Él ha sufrido en sus propias tierras los ataques de este animal que está considerado como un depredador. Además de en la zona del Guadarrama, donde hay cierta tradición, es normal verlos en la actualidad en puntos de la Sierra Oeste y en el Henares.
Anchuelo afirma que desde que se produjo hace dos años el macroincendio de Guadalajara los animales huyeron de Castilla-La Mancha y se han pasado a Madrid, donde han encontrado un buen hogar. "Como son muy listos han encontrado un refugio en el Parque Natural de los Cerros, donde tenemos dificultad por las restricciones que impone la Comunidad de Madrid", añade.
Actúan como depredadores y destrozan las cosechas. Esta semanas, poco después de la siembra, "se están llevando por delante todo lo que pueden", afirma Anchuelo. Dejan rastros inconfundibles y son un peligro además de para los agricultores para la salud.
"Son depredadores y comen incluso animales muertos y luego trasmiten todo tipo de enfermedades, como la brucelosis, la rabia y la triquinosis». Un guarda forestal que conoce bien los campos madrileños afirma que son como una plaga. Destrozan los sembrados, los pastos para la ganadería y los cotos de caza.
"Hay una plaga, es una bestialidad, hay que poner en marcha medidas excepcionales", afirma el agricultor, que propone que durante los próximos dos años se hagan descastes para regular el número.
2.645 ejemplares en 2008
El año 2008 se cazaron 2.645 ejemplares en la Comunidad de Madrid, lo que se calcula que es un 20% del número total que hay en la región. Es decir, por los campos madrileños hay unos 10.000 animales sueltos.
Y también son un peligro para los automovilistas. El teléfono 112 de Emergencias de la Comunidad de Madrid ha notado el aumento de la presencia de los jabalíes.
El pasado mes de enero el servicio de Emergencias tuvo 885 llamadas por asuntos relacionados con los animales, de los que 26 expedientes fueron por la presencia de jabalíes. En diciembre las llamadas por animales fueron de 983, de las que 42 se referían a alarmas por jabalíes tanto en carreteras, donde pueden provocar choques, como cerca de núcleos urbanos.
"Los agricultores queremos que se agilice la autorización de caza fuera de lo que son los cotos, pues están destrozando nuestro trabajo", afirma Anchuelo.
La Consejería de Medio Ambiente reconoce que se ha producido un importante aumento, especialmente en la zona del Henares. "Vienen de Guadalajara y buscan comida y agua y los responsables son los dueños de los aprovechamientos cinegéticos", afirman.
Aseguran que se facilitan los permisos para esperas nocturnas. Afirman que se han dado en los últimos meses un total de 77 permisos para que los agricultores esperen a los animales en las zonas donde acuden a comer y les den caza. Se han permitido también 123 batidas para jabalíes y gamos.
Se calcula que uno de estos bichos puede hacer unos 60 kilómetros en una noche, lo que hace difícil su caza. El presidente de la Federación Madrileña de Caza, Nicanor Ascanio, señaló que hay poca presión cinegética y también falta de pastores, lo que es aprovechado por los animales que se encuentran más libres. Ya no les basta comer los matorrales y acuden a comerse el césped de las urbanizaciones. "No hay que darles nunca de comer y menos si van con sus crías. Un golpe puede ser mortal y si van con crías la madre se revuelve y puede morder armada de unos colmillos imponentes", añade.
El presidente de la Federación señala que si sigue manteniéndose esta presión cinegética en tres o cuatro años se acercarán más a las ciudades, "pues cada vez parece que tienen menos miedo". Es partidario de regular la población y alerta de la invasión que se está produciendo este año al que le quedan pocas semanas de veda.
El agricultor Jesús Anchuelo afirma que lo que no puede suceder es que se convierta en una plaga como la de los conejos, ya que en caso contrario arruinará a la agricultura y la ganadería.
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Madrid (UPA) ha denunciado que la población de jabalíes está causando graves daños en las explotaciones agrícolas, principalmente en las fincas de cereales.
Según la asociación, "estos animales, cuyo número se ha incrementado notablemente en los últimos años, excavan la tierra y hacen grandes agujeros en busca de alimento en fincas en las que nunca ha habido problemas con la fauna salvaje".
La UPA señala que "actualmente son las fincas de cereal las que más sufren los daños, pero en otras épocas del año también se han registrado desperfectos en tierras dedicadas a las hortalizas, el viñedo e incluso en los prados de montaña, con el consiguiente problema medioambiental que ello supone porque esos prados se pierden para siempre".
Afirman que, "además de los perjuicios económicos derivados del descenso de rendimiento en las tierras, los grandes agujeros efectuados por los animales en las fincas causan graves averías en la maquinaria agrícola".
UPA Madrid ha pedido a la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio que tome las medidas necesarias para evitar que estos animales tengan que salir de las zonas protegidas a buscar comida.
La organización recuerda que la responsabilidad de gestionar la fauna salvaje es de las administraciones públicas, no de los agricultores y ganaderos. Pide que la Comunidad de Madrid establezca mecanismos para que cuando se produzcan estos daños se pueda peritar rápidamente y se agilicen medidas como la concesión de permisos a los cazadores.
Publicado el 15 de febrero de 2010 a las 18:15.