Archivado en: Cosmologia, conferencias
Cuando miramos al cielo en una noche estrellada, nos maravillamos con los colores y formas que dibujan las estrellas. Cuando los científicos miran al cielo no se sorprenden por lo que ven, sino por lo que no ven. Más de 400 expertos se reúnen en París esta semana para discutir sobre "El Universo Invisible", una conferencia en la que términos como "energía oscura" o "universos paralelos" no son parte de la ciencia ficción, sino de la investigación física más actual.
En el colegio todos hemos visto alguna vez que con la teoría de la gravitación de Newton y sabiendo lo que tarda la Tiera en completar una órbita alrededor del sol (un año) es posible determinar la masa del sol. Los astrofísicos aplican habitualmente estas leyes sencillas para conocer las masas de los cuerpos que estudian. Sus estimaciones funcionan muy bien en general, pero fallan cuando tratan de aplicarlo al movimiento de estrellas en galaxias espirales: la masa que estiman para las galaxias resulta ser mucho mayor (hasta 10 veces más) que la masa que se deduce a partir de la luminosidad de las galaxias. Si la masa de las galaxias se contase por su número de estrellas (su luminosidad) entonces faltarían muchísimas estrellas. ¿Donde está la masa que falta para explicar las órbitas de las estrellas en esas galaxias? La explicación más aceptada, aunque no es unánime, apunta a que las galaxias están principalmente compuestas de una sustancia que no se puede ver y que se conoce como "materia oscura".
Publicado el 29 de junio de 2009 a las 00:00.