Eclipse, otra fantasía adolescente para acérrimos de Crepúsculo
'Eclipse', la tercera entrega cinematográfica de la saga Crepúsculo, está arrasando en las taquillas de medio mundo y España no iba a ser una excepción, teniendo en cuenta el éxito que han tenido en nuestro país los libros de Stephenie Meyer, cuyos lectores se convierten en el público potencial del filme estadounidense.
La película ha generado todo tipo de opiniones entre los espectadores que han acudido al cine para verla y entre quienes sientan cátedra como periodistas audiovisuales. La pasión con la que uno observe este título dirigido por Slade marca la pauta a la hora de configurar la crítica. 'Eclipse' no se ha convertido en una cinta más oscura, adulta y dinámica. Simplemente, supone un conocido trasvase del libro a la película, con las mismas nociones de marketing en ambos procesos creativos.
decente trasvase
'Eclipse' utiliza una carga menos emocional que en los títulos anteriores. Desarrolla un decente sentido de la intriga y aprueba como melodrama romántico, aunque ofrece un conservadurismo incoherente cuando piensas en las letras originales.
La lucha del vampiro y el hombre lobo por el corazón de la bella señorita o el joven dilema amoroso centran la aparición de 'Eclipse', aunque todo esté teñido por una fantasía adolescente poco comprensible si desconoces el material literario disponible. Resultará insípida para cinéfilos ajenos a este fenómeno social.
Publicado el 9 de julio de 2010 a las 17:00.
