Ilusión, confianza, optimismo y esperanza para el Año Nuevo
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A punto de concluir 2009, se suceden las felicitaciones con mensajes que insisten en la necesidad de, ‘ahora, más que nunca’, en tiempo de crisis, sentir ilusión, confianza, optimismo y esperanza ante el nuevo año.
‘Que no falten sueños por los que luchar y proyectos que realizar’; ‘salud, paz y felicidad’; ‘progreso consciente y evolución responsable’; ‘suerte’; ‘justicia, desarrollo y esperanza’; ‘paz, unión, alegrías, amor, realizaciones, respeto, solidaridad...’; ‘amor y felicidad’; ‘buenos momentos y experiencias inolvidables’; ‘12 meses de alegrías, 52 semanas de ilusión y 365 días de felicidad’; ‘buenas iniciativas y éxitos’... La relación de buenos deseos es interminable y, muy necesaria.
Con las campanadas nos marcaremos nuevos propósitos, nuevos objetivos, nuevos proyectos. Destaco el deseo que formula la directora ejecutiva de UNICEF España, Paloma Escudero: “Una uva, un deseo, un compromiso por la infancia, hará posible que en 2010 más niños puedan tener un presente más justo y un futuro mejor”.
No olvidemos que todavía mueren al año, por causas evitables, casi nueve millones de niños antes de cumplir los 5 años; 101 millones no van a la escuela y entre 500 y 1.500 millones sufren alguna forma de violencia, abuso o explotación. Ellos son los más vulnerables.
La Navidad, tiempo para el reencuentro, para las celebraciones, para el intercambio de buenos deseos, pero, sobre todo, tiempo para renovar mi compromiso con todos ustedes, a quienes desde este espacio les agradezco su confianza y les deseo una muy Feliz Navidad y un próspero Año Nuevo.
Publicado el 23 de diciembre de 2009 a las 15:30.
