'Millenium, Los hombres que no amaban a las mujeres', ¿buena o mala?
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Ya vi Los hombres que no amaban a las mujeres, la primera entrega de la trilogía Millennium del escritor sueco Stieg Larsson.
Reconozco que soy un total desconocedor de esta obra literaria así que fui al cine sin ningún tipo de perjuicio. Lo que iba a ver era un universo totalmente nuevo para mi, no así para mi acompañante, una gran admiradora de la obra de Stieg Larsson. Así que voy a exponer dos opiniones distintas sobre esta peli, la de un novato en el universo Millenium y la de una experta.
Para mi, Los hombres que no amaban a la mujeres es una muy buena peli, una aproximación al mejor cine negro americano mezclado con un estilo (tanto en los diálogos como en lo visual) muy del norte europeo. Todos los personajes están muy bien diseñados, pero desde luego quien se lleva la palma es Lisbeth Salander, interpretado a la perfección por Noomi Rapace. A pesar de sus 152 minutos, la peli apenas tiene bajones, aunque los hay. Quizá 20 o 30 minutos la convertiría en una peli casi redonda. Uno de los puntos débiles es su banda sonora, demasiado convencional y demasiado obvia a la hora de querer mostrarnos que la investigación avanza o de que hay un momento muy importante que el espectador no debe perderse.
Desde luego es una gran película para quien no haya leído el libro. Pero, ¿y si lo habéis leído?
Es difícil leer un libro y que luego la peli no te defraude, creo que en el 90% de los casos es así. Cuando lees te imaginas a los personajes de una manera que casi nunca se corresponde con lo que luego ves en la pantalla.
También se profundiza más, los libros son más extensos y a la hora de adaptarlos hay que cortar muchas cosas. Y lo que corta el guionista no siempre coincide en lo que cortaría el lector.
Así que a mi compañera de butaca no le entusiasmó Los hombres que no aman a las mujeres, aunque tampoco la odió. Lo que más me sorprendió es que aborreció y le decepcionó profundamente Noomi Rapace. No la consideró, ni mucho menos, la actriz adecuada para encarnar a Lisbert Salander y su interpretación le pareció bastante pobre. No así la de Michael Nyquist, el otro protagonista. Supo valorar guión, respetuoso y fiel con el libro. Aunque coincidimos en que le sobraban algunos minutos y que hacia el final se hacia demasiado larga.
Bueno, a ver que os parece a vosotros.
Publicado el 16 de junio de 2009 a las 11:00.