Responsabilidad política versus ministro furtivo
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No podía ser de otra forma. Polémica fue su cacería y su dimisión ha abierto las puertas del debate en el seno de los partidos políticos.
La dimisión del Ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo (Arenas de San Pedro, 1948), está levantando ampollas. Y división, sobre todo, división. Para la secretaria provincial del PSOE de Ávila, Mercedes Martín, se trata de un gesto de "responsabilidad política y democrática" dado que el abulense renuncia a su cargo "a pesar de que no ha sido imputado ni está implicado en ningún delito", en clara referencia al Partido Popular.
El PP de Ávila, en boca de su presidente, Antolín Sanz, califica la noticia de "muy buena para todos los españoles y abulenses", porque "ha sido un pésimo ministro, incapaz de modernizar la Justicia y totalmente descomprometido con nuestra provincia". Para Sanz, el "ministro furtivo" y "de la bronca permanente" se marcha como "un furtivo que caza gratis total, y sin licencia".
Asumir responsabilidades forma parte de la labor de cualquier político que se precie como tal. Curiosa coincidencia que se produzca un 23-F. Parece que la democracia vuelve a darnos otra lección.
Y así concluye el periplo en el Gobierno de Zapatero del primer ministro del actual Ejecutivo que presenta su dimisión, tras afrontar la primera huelga de jueces de la historia. Pero ¿por qué será recordado Bermejo?
Publicado el 23 de febrero de 2009 a las 20:30.
