Empresas humanas
He pensado comenzar este nuevo post (me he dejado llevar por el anglicismo, algo que suelo evitar, disculpas a los más puristas) por el titular mismo. A alguno le pudiera parecer una antítesis por aquello de empresas y humanas, pero no. Lo cortés no quita lo valiente.
Hubo un tiempo en que los trabajadores, quienes ponen su potencial al servicio de una idea empresarial, invirtiendo su tiempo y esfuerzo, se sentían correspondidos. Lo mismo los empresarios. Después, la necesidad e ser competitivos y de permanencia, parece que derivó en una voracidad imparable. Ahora que llegan las vacas flacas, muy flacas, podría parecer que todo vale. Y de eso nada.
Multinacionales que ejecutan despidos en masa sin importarle las formas y empleados que al abandonar su puesto se adueñan de un trabajo realizado que ya no les pertenece.
Es notoria la deshumanización que estamos sufriendo, sangrante en ocasiones en el ámbito laboral. Una especie de involución -ahora que Darwin vuelve a estar de actualidad- pero aplicada a la economía.
Lo mismo que las empresas "advenedizas" -como escuché decir una vez a un empresario de la construcción- son las primeras que desaparecen con la crisis, tal vez esta época de recesión se lleve consigo todo lo que sobra.
Publicado el 14 de febrero de 2009 a las 10:00.